Curado del concreto fresco. El objetivo del curado en pisos de concreto, es el de optimizar la hidratación del cemento, manteniendo un contenido de humedad y temperatura óptimos en el concreto.
A través de la hidratación de las partículas de cemento, se desarrolla su incremento de resistencia y por ende la resistencia a la abrasión aumenta. Las condiciones óptimas del concreto para el curado están en el rango de 10°c a los 21°C. A temperaturas menores de los 10°C el tiempo de fraguado se incrementa y el procedimiento de acabado se lleva más tiempo. A temperaturas mayores a los 21°C el riesgo de agrietamientos aumenta. Una losa de concreto tiene una larga superficie expuesta a la intemperie en relación con su volumen, de tal modo que si la superficie se encuentra descubierta, el agua puede rápidamente evaporarse y provocar el secado temprano de la losa. Lo anterior inhibe la hidratación del cemento, produciendo una superficie de concreto débil con baja resistencia a la abrasión. Si el secado es excesivo, aún con tráfico ligero en la losa puede provocar polvo.
Un cierto tipo de agrietamiento también se le atribuye a un inadecuado proceso en el curado; por todos estos motivos resulta indispensable un adecuado proceso de curado. El curado continuo con agua de una losa, debe ser de por lo menos de 7 días. Los métodos más eficaces para la mayoría de los pisos industriales son aquellos en los que se utiliza agua, pero no siempre pueden ser los más prácticos, por ejemplo, los pisos con superficies metálicas requieren técnicas de curado especiales. Para este tipo de piso deben seguirse las recomendaciones o instrucciones del fabricante de los materiales metálicos.
Para el proceso del curado, se enuncian los siguientes tres métodos alternativos: 1. Compuestos de curado. Consiste en el sellado de la superficie y bordes mediante la aplicación con aspersor de una membrana o compuesto de curado. El compuesto de curado deberá ser de un tipo que no deje una decoloración o marca permanente en la superficie, así como no intervenir en la aplicación de cualquier tratamiento superficial subsecuente. 2. Mediante hojas de polietileno o papel impermeable. Las películas de polietileno y las hojas de papel impermeable son usadas como métodos de retención de humedad del concreto de la superficie previamente humedecida, colocada tan pronto como sea posible sin dejar marca en la superficie.
Sin embargo, este método de curado no se recomienda para pisos de acabado aparente debido a que el color de la superficie de concreto puede no llegar a ser uniforme, de hecho las manchas son más frecuentes si la cubierta de polietileno está expuesta directamente a los rayos del sol. 3. Mediante una cubierta húmeda. La lona es el recubrimiento húmedo usado con mayor frecuencia. Este material y otros recubrimientos húmedos, cuando se aplican en la forma correcta, proporcionan un abastecimiento continuo de humedad, distribuida uniformemente sobre la superficie.
Se deben colocar sobre el concreto tan pronto como esté lo bastante duro para que la superficie no se dañe. Todos los bordes expuestos del concreto deben ser cubiertos con sumo cuidado. Los recubrimientos deben mantenerse húmedos, de manera que la superficie húmeda permanezca en contacto continuo con el concreto, durante el periodo de curado. Como se menciona con anterioridad, el método más efectivo de curado es el de mantener continuamente con agua la superficie de concreto, sin embargo, tiene las desventajas de limitar los trabajos posteriores que se deban hacer sobre la superficie, ya que muy poco o prácticamente nada se puede hacer hasta que se termine el periodo de curado y se remueva el agua, además el agua puede filtrarse dentro de las juntas y grietas, incrementando el contenido de agua de la subrasante.
No importa que método de curado sea elegido, los bordes de las juntas también deberán ser curados. Esto es especialmente crítico en juntas en pisos industriales que estarán sometidas al tráfico de montacargas. En el caso que el compuesto o membrana de curado interfiera con el sellador a emplear en las juntas, la membrana podrá ser removida de los bordes de la junta mediante corte con disco o algún medio mecánico. Una solución práctica a este problema es colocar arena húmeda al interior de la junta, lo que mantendrá húmedos los bordes de la junta el tiempo que dure el proceso de curado. La superficie del piso recién construido deberá protegerse de las actividades de construcción posteriores. Por tal motivo se hacen las siguientes recomendaciones: 1. Evitar pisar el piso por al menos un día. 2. Evitar el tránsito de vehículos ligeros de llantas sólidas en un lapso de 7 días, a menos que las pruebas de laboratorio muestren que el concreto ha alcanzado una resistencia mínima de 210 kg/cm2 a la compresión simple. 3. Dejar las hojas de papel o plástico el mayor tiempo posible en el piso. Proteger la superficie de la losa con hojas de madera o con algún otro medio cuando se espere tráfico pesado. Gracias al colaborador Erick P. Almonte por enviarnos este material para ser publicado en ARQHYS.com.