Ponte Vecchio – Florencia.
El Ponte Vecchio (puente viejo en castellano) es un puente medieval sobre el río Arno en Florencia, Italia. Se cree que fue un puente construido inicialmente en madera por los romanos. Tras ser destruido por una inundación en 1333, se reconstruyó, esta vez enteramente de piedra, en 1345. Su diseño se atribuye al arquitecto y pintor italiano Taddeo Gaddi (pintor y arquitecto gótico). Entrando en detalle, el puente se sostiene sobre tres arcos: el principal tiene una envergadura de 30 metros y los otros dos de 27 metros. El alzado de los arcos varía entre 3,5 y 4,4 metros. Es el puente más antiguo de Europa construido totalmente en piedra, en arco segmentado tipo closed-spandrel (puente de arco).
Desde siempre ha tenido gran actividad comercial sobre él (principalmente joyerías), según la leyenda porque en el puente se estaba exento de tasas e impuestos. Los comerciantes eran autorizados antiguamente a mostrar sus mercancías sobre mesas por el Bargello (una especie de magistrado comunal). Se cree además que el término Bancarrota se originó en este puente, debido a que cuando un vendedor no podía pagar sus deudas, su mesa o puesto para la venta, era rota por los soldados (banco y roto forman bancarrota). Y al no disponer ya de una mesa el comerciante no podía vender sus mercancías.
Para conectar el Palazzo Vecchio (el palacio municipal de Florencia) con el Palazzo Pitti (actualmente es un museo renacentista), en 1565 Cosimo I de Medici (duque de Florencia) le solicitó a Giorgio Vasari que construyera el famoso Corredor vasariano sobre el puente. Y para aumentar el prestigio del puente, en 1593 prohibió a los carniceros el realizar sus actividades comerciales sobre allí; pero el sitio que estuvo vacante fue inmediatamente ocupado por los joyeros y comerciantes de oro -la asociación de carniceros había monopolizado los negocios sobre el puente desde 1442. Durante la Segunda Guerra Mundial, a diferencia de otros puentes de Florencia, el Ponte Vecchio no fue destruido por los alemanes durante su retirada el 4 de agosto de 1944. Según la tradición esto se debió a una orden expresa de Hitler. Sin embargo los alemanes bloquearon el acceso al Ponte Vecchio, mediante la destrucción de los edificios en proximidades de ambas cabeceras.