La clasificación del suelo. El suelo es la capa superficial de la Tierra y constituye el medio principal en el cual se desarrollan las plantas, aportando los nutrientes, el aire y el agua indispensables para su crecimiento.
El suelo se extiende tanto superficialmente como también en profundidad, formando capas u horizontes paralelas a la superficie, cada uno con propiedades físicas y químicas propias. A continuación se presentan los diferentes órdenes en los que se clasifican los suelos.
Orden en que se clasifican los suelos.
Suelos Gelisoles
Poseen un permafrost en los primeros 100 cm de la superficie del suelo y/o materiales gelic dentro de los primeros 100 cm y permafrost dentro de los primeros 200 cm de la superficie. Materiales gelic son materiales minerales u orgánicos con evidencia de criocongelación.
Suelos Histosoles
Son predominantemente orgánicos, sin permafrost, conocidos como pantanos, turbas y ciénagas
Suelos Alfisoles
Incluye aquellos con aprovechamiento agrícola intensivo debido a su régimen hídrico y su elevado nivel de saturación de bases (mayor a 35%).
Poseen un horizonte argílico, kándico o nátrico. Normalmente poseen un epipedón ócrico y un horizonte petrocálcico, fragipán o duripán.
Suelos Andisoles
Incluye desde suelos poco alterados con gran cantidad de vidrio volcánico hasta suelos altamente meteorizados, por lo tanto el contenido de vidrio volcánico es característico de estos suelos.
Suelos Aridisoles
Son demasiado secos para el desarrollo y crecimiento de las plantas mesofíticas. Poseen un régimen de humedad arídico, en años normales no tienen humedad disponible para las plantas durante más de la mitad del tiempo en que la temperatura del suelo a 50 cm es superior a 5°C.
Suelos Entisoles
Poseen escasa evidencia de desarrollo de horizontes pedogénicos. Tienen un epipedón ócrico o antrópico, arenosos y superficiales.
Suelos Inceptisoles
Estás regiones húmedas y subhúmedas con horizontes alterados que han sufrido pérdidas de bases y minerales pero que conservan minerales meteorizables.
Suelos Mollisoles
Tienen un horizonte superficial oscuro, rico en bases, con un epipedón móllico. Muchos de ellos poseen un horizonte nátrico, argílico o cálcico.
Suelos Oxisoles
Son suelos de regiones tropicales y subtropicales, de pendientes suaves y superficies antiguas. Poseen una mezcla de cuarzo, caolín, materia orgánica y óxidos libres.
Suelos Spodosoles
Poseen acumulaciones de mezclas amorfas de materia orgánica con aluminio y/ hierro. Textura areno esquelética a franco arenoso.
Suelos Ultisoles
Cuenta con un horizonte apreciable cantidad de arcilla silicatada traslocada y poca saturación de bases.
Suelos Vertisoles
Poseen gran cantidad de arcillas expandibles que cuando están secos forman grandes grietas.
Sistema de clasificación de suelos AASHTO.
De acuerdo a la mecánica de suelos, se han establecido sistemas de clasificaciones de los suelos, como por ejemplo AASHTO.
En estos sistemas de clasificación se consideran en general suelos de tipo granulares y limosos-arcillosos, dentro de los cuales existen subdivisiones que están relacionadas con el tamaño de las partículas del suelo, el limite liquido, índice de plasticidad e índice de grupo.
Clasificación del suelo según su textura
El suelo se clasifica según su textura: fina o gruesa, y por su estructura: floculada, agregada o dispersa, lo que define su porosidad que permite una mayor o menor circulación del agua, y por lo tanto la existencia de vegetales que necesitan concentraciones más o menos elevadas de agua o de gases.
El suelo también se puede clasificar por sus características químicas, por su poder de absorción de coloides y por su grado de acidez (pH), que permite la existencia de una vegetación más o menos necesitada de ciertos compuestos.
Los suelos no evolucionados.
Los suelos no evolucionados son suelos brutos, muy próximos a la roca madre y apenas tienen aporte de materia orgánica.
Son resultado de fenómenos erosivos o de la acumulación reciente de aportes aluviales. De este tipo son los suelos polares y los desiertos, tanto de roca como de arena, así como las playas.
Los suelos poco evolucionados dependen en gran medida de la naturaleza de la roca madre. Existen tres tipos básicos: ránker, rendzina y los suelos de estepa.
Los suelos ránker son más o menos ácidos, como los suelos de tundra y los alpinos.
Los suelos rendzina se forman sobre una roca madre carbonatada, como la caliza, suelen ser fruto de la erosión y son suelos básicos. Los suelos de estepa se desarrollan en climas continentales y mediterráneo subárido.
El aporte de materia orgánica es muy alto. Según sea la aridez del clima pueden ser desde castaños hasta rojos.
Suelo evolucionado.
En los suelos evolucionados encontramos todo tipo de humus, y cierta independencia de la roca madre.
Hay una gran variadad y entre ellos se incluyen los suelos de bosques templados, los de regiones con gran abundancia de precipitaciones, los de climas templados y el suelo rojo mediterráneo.
En general, si el clima es propicio y el lugar accesible, la mayoria de estos suelos están hoy ocupados por explotaciones agrícolas.
Horizontes del suelo.
En general existen tres horizontes A, B y C, luego está la roca madre. Al conjunto de horizontes se le denomina Perfil.
- El horizonte A: es la capa superficial y arable, más oscura y con más materia orgánica.
- El horizonte B: es más arcilloso, menos fértil y sus agregados son más grandes.
- El horizonte C: es la capa más profunda, prácticamente sin raíces.
El suelo es afectado por las diversas actividades humanas (industriales, agrícolas y urbanas) lo que resulta en su degradación y pérdida de sus funciones con consecuencias directa sobre la sobrevivencia de todos los seres vivos.
Dada su importancia, es necesario el uso de un lenguaje común que permita a toda la comunidad global manejarse en los mismos términos para fines de uso, manejo, conservación e investigación.
Para ello, se creó el Sistema de Clasificación de Suelos “USDA Soil Taxonomy” en el cual agrupa y clasifica todos los suelos del mundo en categorías taxonómicas que van desde órdenes subórdenes subgrupos, grandes grupos, familias y series.
Cada categoría está basada en características observables de campo y de laboratorio. Utiliza una nomenclatura basada en lenguas muertas como el griego y el latín.