Contenido energético.
El contenido energético no es más que la cantidad de energía que se necesita para fabricar y suministrar un material, producto o servicio. Este proceso se realiza desde la extracción de la materia prima hasta su eliminación; en donde se involucra el modo de transporte, el montaje, la instalación, etc. Es también conocido por tres denominaciones, que son: Energía incrustada. Energía oculta. Energía virtual.
Existen diferentes metodologías para contabilizar la energía en función al alcance de aplicación del bien a producir y a la escala. Una de estas metodologías se relaciona con el consumo de petróleo. Hay otro tipo de metodología que señala el valor de energía para incorporar energía renovable en el proceso productivo y para apoyar el desarrollo sostenible. También existen otros, como son los sistemas de ecología; que señala a la economía como un proceso total y que apoya la ecología en grandes magnitudes.
El contenido energético tiene como función principal medir el costo energético atendiendo al enfoque ecológico de la economía. Hoy en día, es muy utilizado para el desarrollo sostenible de viviendas y edificaciones; el cual es redactado en el Código de edificación del Reino unido, y en la certificación LEED (Liderazgo en Energía y Diseño Ambiental) de EEUU; los cuales buscan obtener una arquitectura sustentable. Las unidades de medidas que generalmente utiliza este concepto son: tCO2 y MJ/kg.