Palacio Errazuriz Urmeneta.
El Palacio Errázuriz, es una edificación inspirada en el estilo neoclásico, que se encuentra ubicada en el número 1656 de la Avenida Alameda de Santiago de Chile, en el barrio Dieciocho, el cual era un lugar predilecto de la alta sociedad Santiaguina del siglo XIX.
Quién ordenó la construcción de este palacio fue Maximiano Errázuriz en el año 1872, siendo ésta realizada por Eusebio Chelli, un arquitecto italiano. Cuando se edificó el Palacio Errázuriz, fue un deslumbre para la sociedad de la temporada, pues era bastante ostentoso, de hecho, muchos catalogaron esta construcción como la mejor casa de Santiago, inclusive mejor que el Palacio Cousiño.
Actualmente en el Palacio Errázuriz, se encuentra la Embajada de Brasil. Este palacio tiene un aspecto sobrio e imponente, aunque se caracteriza formalmente por el neoclasicismo, es obvia su influencia Italiana. En su fachada principal, se observan tres volúmenes, de los cuales el central es de 2 niveles.
Originalmente se accedía a él, tras pasar por el pabellón oriente y no por su pórtico lujoso, el cual además de su altura doble, tenía columnas tanto jónicas como corintias. En el interior del mismo, los espacios están ordenados con relación a un pasillo de doble altura, en el cual se destacan los diferentes tipos de mármol que tiene el piso del espacio.
De todos los salones del mismo, se destaca el gran salón de baile, cuya decoración posee relieves y espejos venecianos; otra de las áreas características es el comedor, así como también el salón de fumar, salón de juegos, de tertulias, y la biblioteca, entre otros, pues en total eran 12 salones distribuidos en el primer nivel y aproximadamente 10 dormitorios en el segundo nivel.
El parque del palacio estaba decorado con un estilo romántico, este ha sufrido algunos cambios al paso del tiempo. El primer propietario de esta edificación fue Maximiano Errázuriz, quien era un adinerado industrial, además de ser minero y hacendado. En el año 1883 el palacio se vendió a Ramón Cruz Moreno, un gran coleccionista, padre del arquitecto chileno Alberto Cruz Montt, el cual se encargó de amueblar la casa sin ningún tipo de percances. Pasó por otros dueños antes de que en el 1941 el Gobierno del Brasil, lo obtuviera y lo transformase en Embajada, función actual del mismo