Templos cristianos.
En las iglesias cristianas, el termino templo tiene dos significados muy importantes, ambos están escritos en la Biblia.
El primero se refiere al cuerpo físico humano, pues se considera que el mismo es un templo sagrado, razón por la que debe cuidarse.
La segunda utilización de la palabra templo, se refiere a una edificación de especial importancia, que se considera la casa del señor, en este espacio es donde los fieles se dirigen para recibir las normas correspondientes, así como también los consejos religiosos que tienen alguna relación con la espiritualidad.
En todos los textos cristianos, se habla del templo solamente como una vía para la congregación, es decir que el mismo no es de vital importancia en el conjunto de aspectos relacionados con la fe.
Incluso, Jesús, le resta importancia al templo físico, en ocasiones que los apóstoles se referían a la belleza física de los mismos, lo cual se puede confirmar en algunos de sus pasajes.
Cuando la religión del cristianismo, se institucionalizó, el templo que utilizaban seguía el patrón utilizado por los romanos como basílica, el cual era una construcción de uso civil.
Utilizaron este patrón ya que era el espacio cubierto que reunía una serie mayor de condiciones para efectuar los rituales de su religión.
Hoy en día cada templo cristiano que se encuentra en cualquier parte el mundo, es una obra elaborada con una planificación previa, cuyo diseño y construcción es elaborado por una persona especialista en la materia, tomando en cuenta la importancia que tienen en ellos las dimensiones, además de la función e impactos que causará en el ámbito urbano y ambiental.