Templos griegos.
Los templos construidos por la civilización de la antigua Grecia, son considerados como los más hermosos y son los que están dotados de una mayor armonía. Estos templos fueron reproducidos luego por arquitectos del Imperio Romano y muchas veces sirvieron de muestra para la arquitectura religiosa y profana del occidente. La planta del templo griego es una derivación del megaron micénico, este es el principal aporte realizado de la época arcaica.
El templo griego no se utiliza como un espacio para los fieles, pues ellos realizaban sus cultos y ceremonias fuera del templo; en el interior sólo se colocaba la estatua del dios que alababan.
Para la edificación de los mismos, originalmente se utilizaban todo tipo de materiales que tuvieran a su alcance, por ejemplo el adobe o la madera, así como también cualquier recurso natural, pues las primeras columnas por citar un ejemplo, fueron unos troncos de árboles tallados con un hacha. Estos troncos tenían como apoyo una base elaborada de piedra, que servia de protección en contra de la humedad. Al llegar el año 600 a. C. comienza la sustitución de esos materiales que se empleaban hasta el momento y en cambio se utilizan la piedra y el mármol, conservando la apariencia exterior de los antiguos templos.
Todas las partes de estos templos eran decorados utilizando colores vivos. La ordenación de los mismos se realizaba según estrictos patrones de simetría y proporción. Con el objetivo de que el templo no parezca deformado visto a cierta distancia, ellos ponían las columnas de los extremos un poco más amplias que las demás para que a la distancia no se vieran más estrechas que el resto de ellas. La disposición de los espacios del templo griego se realiza en torno a la cella o naos, que es el nombre de una sala en la que se guarda la estatua del dios, luego de esta sala se halla el pronaos, y posteriormente el opistodomo.
Según la manera en que son dispuestas y la cantidad de columnas del templo, estos se diferenciaban, ya que había varios tipos de templos. Según la ubicación de las mismas, los templos se clasifican como:
- Perípteros, cuando las columnas rodeaban todo su exterior.
- Próstilo, cuando sólo tenían columnas en sus fachadas.
- Anfipróstilos, cuando las columnas estaban ubicadas en los lados de menor longitud del templo.
Según la cantidad de columnas de la fachada:
- Dístilo (dos).
- Tetrástilo (cuatro).
- Hexástilo (seis).
- Octástilo (ocho).
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