Surgió en los tiempos de la época del barroco, el cual se desarrolló hasta la Nueva España.
Era conocido con el nombre de barroco estípite. El nombre actual se creó a través del apellido Churriega, que en esa época era con que se reconocían a los arquitectos barrocos que utilizaban en sus obras la decoración recargada. En la actualidad esta etapa es utilizada para denominar el barroco español surgido en los inicios del siglo XVIII. Las edificaciones conocidas como churriguerescas eran las que poseían una complicada ornamentación y un marcado movimiento.
A diferencia del tradicional barroco, este estilo muestra mucha más ornamentación tanto en su interior como en su parte externa. El primer arquitecto en trabajar con este nuevo estilo y quien le dio nombre a esta etapa fue José de Churriguera, quien trabajaba con mayor demanda los retablos, creando diversos de ellos en diferentes partes de España, como era en Salamanca, Valladolid y Madrid. De estos establos quedan poco en buen estado, de los cuales se pueden destacar en:
El coro de la Catedral Nueva de Salamanca. El Retablo de Convento de San Esteban en Salamanca. La Plaza mayor en Salamanca. La población del Nuevo Baztán.
Han sido muchas la edificaciones que se han erigido acorde con este estilo, por ejemplo; en México se destaca la Catedral Basilical de la ciudad de Zacatecas, la parroquia de Santa Prisca, el retablo del templo de San Francisco Javier, las portadas del Sagrario Metropolitano, y el altar de los Reyes de la Catedral Metropolitana.