Muebles Griegos.
Los ejemplos disponibles sugieren que los diseñadores griegos no siguieron las formas libres de las piezas egeas. La tendencia a basar la ornamentación del mobiliario en decoraciones arquitectónicas, así como la simetría y la regularidad del diseño global parecen seguir el precedente egipcio. No obstante, aunque se parecen, el kliné (cama) griego es bastante diferente, en cuanto a funcionalidad, a su equivalente egipcio; el griego se utilizaba para comer y descansar, y disponía de una parte horizontal para reclinarse a la altura de la mesa, en lugar de estar a la altura del suelo. El apoyo para la cabeza era, por lo general, curvo y no se utilizaban apoyos para los pies. Aunque las patas con formas de animales se ven en alguna ocasión, eran más comunes con forma de trompeta o de columna. Para sentarse se utilizaban diversos tipos de taburetes.
Al menos desde el siglo IV a.C. hasta la época helenística se emplearon también taburetes plegables con patas en forma de X y otros fijos con patas rectas. Los ejemplos funcionales y sencillos convivían con otros más elaborados. La innovación más distintiva de los diseñadores griegos fue la silla conocida como klismos, que era ligera y con respaldo. Confortable y muy popular, se utilizó principalmente en los periodos arcaico y clásico. El klismos era básicamente liso, con patas curvadas hacia fuera desde el asiento y un respaldo que consistía en un sencillo tablero rectangular curvado desde los lados hacia el centro.
Las mesas representadas en las pinturas eran por lo general pequeñas; parece ser que las rectangulares eran las más comunes. Solían tener tres patas en la mayoría de los casos, sencillas y curvadas, pero a veces talladas con formas de animales que podían estar reforzadas con bastidores cerca de la parte superior. Las referencias escritas y las ilustraciones sugieren que las mesas típicas eran ligeras; se colocaban en el comedor a la hora de comer y se retiraban después para dejar un espacio destinado a distintas representaciones teatrales. Las mesas redondas de origen griego surgieron en el periodo helenístico. Los arcones de la Grecia antigua variaban en tamaño, desde los realizados a escala reducida a los que tenían tamaños monumentales, y en diseño, pues había modelos que tenían la parte superior plana, mientras que otros presentaban estilos más arquitectónicos con cubiertas de gablete. Se fabricaban de madera, bronce y marfil, con decoraciones arquitectónicas. Las formas de los arcones son una constante a lo largo de la historia; se descubrieron por primera vez en el antiguo Egipto y se convirtieron en algo tradicional hasta los ejemplos más populares del siglo XIX.
Enviado por: Pedro de Jesus A.,
Fuente oficial: Archivo de consulta personal.