Pintura de paredes. Existen muchas técnicas para pintar las paredes de una vivienda o negocio, ahora bien la técnica más usada por su sencillez y rápida terminación es el esponjeado, que da la sensación de una superficie texturizada, sin serlo. El esponjeado se puede realizar en diferentes superficies, ya sea de madera, de yeso, de cerámica, de mampostería, etc. Su aplicación le da una perfecta ornamentación y un estilo original al área en donde es aplicado, ya sea en el recibidor, en las habitaciones, en los salones, etc.
Es perfecto para disimular las imperfecciones que generalmente se originan en la pared, como son las grietas, los huecos, arañazos, etc. La pintura acrílica es la más recomendada para reproducir este acabado en las paredes. Ahora bien, los colores más optados para similar perfectamente la textura en la superficie son los que están dentro de una misma gama, de este modo no habrá una saturación de color en la pared y siempre se mantendrá la delicadeza en ella. Si después de la terminación, la superficie presenta alguna mancha o algún defecto en el color dado, el usuario puede aplicar una capa de color preferiblemente el que utilizó en la capa base, para disimular la imperfección del acabado. Es recomendable utilizar blancos mezclados.
A la hora de aplicar la técnica en la superficie, lo primero que se debe hacer es practicar en un soporte diferente para dominar la técnica antes de aplicarla en la pared. Ahora bien, existen varios consejos que facilitarán la aplicación y el perfecto acabado de esta técnica, estos son: La esponja no debe tener exceso de pintura. Es recomendable realizar una prueba en el cartón del color a dar, para así tener la combinación perfecta. El diseño no puede ser geométrico. Recorte tiras de esponja para pintar los bordes y los rincones. Lave las herramientas luego de terminar el trabajo. El tipo de esponja que utilice influirá en el acabado. Por ello se recomienda el uso de esponjas naturales que ofrecen un mejor y perfecto acabado.
