La industria lechera ha decidido que el mejor material para poder transportar sus leches en excelente estado son los tanques de acero inoxidable. Al igual que sucede con las ollas y con otros elementos de la cocina, los tanques de acero inoxidable no se desintegran, ni despiden colorantes, ni partículas que puedan afectar el sabor y la composición de la leche. Es por eso que para seguir manteniendo su estado original, la mejor opción fue utilizar tanques de acero inoxidable.