Puentes romanos.
Las características principales de estos puentes son: Arcos formados por semicírculos puros, de medio punto o por segmentos de círculos, rebajados.
En algunas ocasiones, se conectan por debajo formando círculos completos.
- Tableros en rampas, cuyas rasantes se unen al centro.
- Pilas que no se destacan mucho, las construidas en el agua poseen tajamares en el lado de la corriente.
- Arcos de descarga practicados en la mampostería sobre las pilas para dejar pasar el agua de las crecidas.
- Entre los puentes más grandiosos del imperio destacan:
- Pons Fabricius, 62 a.C.
- Pont Du Gard, 15 a.C., en Nimes, la Galia (Francia). 275 m de largo, 49 mts de altura. 0,3 a 0,4% de inclinación
Piso inferior 6 arcos de 20 mts de altura. Canal de agua, 1,85 de altura y 1,20 de ancho.