Sistemas que mantienen el menor consumo de agua.
Una de las formas de contribuir con el medio ambiente es ahorrando la mayor cantidad de agua, para ello existen aparatos y sistemas que llegan a reducir al máximo el consumo del agua.
Siempre se busca la forma de ahorrar el agua no solo por el coste de la factura sino también para contribuir con el medio ambiente.
Desde temprana edad muchas madres educan a sus hijos sobre la importancia del agua y porque racionalizarla, sin embargo en ocasiones por mas consciencia que se tenga sobre este tema resulta imposible su desperdicio, principalmente por el tipo de grifería utilizada en el hogar.
Es por ello que se han pensado en nuevos sistemas y aparatos con los cuales se evita este desperdicio y se maximiza el aprovechamiento del agua. Los sistemas que se pueden utilizar para racionalizar el agua son muchos, un ejemplo de ello cabe detacar la cabeza de ducha de flujo reducido, las cisternas de bajo consumo, las lavadoras de bajo consumo, los grifos monomando, y aquellos sistemas de recirculación de agua.
Con el uso de las cisternas de bajo consumo se logra reducir el consumo del agua varias veces. Estas han dejado atrás las cisternas antiguas ya que con estas se logran descargas de hasta siete litros de agua, mientras que en las antiguas se realizaban descargas de hasta 30 litros. Toda cisterna debe tener un nivel de flotador para que este se detenga cuando la cisterna se llene.
Un aparato muy utilizado cuando se piensa en economizar el agua es la cabeza de ducha de flujo reducido, el cual disminuye el caudal del agua y al mismo tiempo aumenta la presión para garantizar un perfecto confort. Para obtener un mayor ahorro de agua muchas personas instalan un accesorio conocido como perlizador, el cual viene en distintos formatos para su perfecta ubicación entre el extremo de la manguera y el cabezal de la ducha.
Así mismo cabe destacar el uso de los grifos monomandos que son de gran popularidad. Con estos grifos no habrá gotera de agua una vez la llave sea cerrada, y al mismo tiempo llegan a mantener una perfecta regulación de la temperatura del agua. Algunos equipos y maquinas tienden a gastar mucha agua, un ejemplo de ello son las lavadoras tradicionales, es por ello que se aconseja utilizar aquellos modelos creados con programas de bajo consumo de agua, los cuales tienen una mayor duración y consumen menos energía eléctrica.
