El rosa y gris son dos colores muy bellos que, aunque son opuesto, hacen una combinación sensacional que irradia la alegría y relajación necesaria para la habitación de un bebé.
La actual tendencia en materia de decoración de dormitorios para bebés señala a los colores rosa y gris como los más apetecidos por las parejas que están en el proceso de decidir cómo será la decoración del espacio donde descansará su esperado pequeño, por lo menos durante sus primeros meses o años de vida.
La propuesta de hoy consiste en utilizar el gris y el rosa para la decoración de la habitación del bebé. El color gris otorga elegancia y clase, mientras que el rosa recrea un ambiente jovial e informal que los bebés necesitan para estimular sus sentidos y generarles un ambiente dulce y alegre.
Existe una gran variedad de diseños de habitaciones en estos dos colores distribuidos de diferentes maneras según sean nuestros gustos y las características de nuestra casa, así que encontrar la mejor decoración no debería significar un problema.
Tradicionalmente, los colores rosa y gris tienden a complementarse de forma acertada sobre fondos blancos creando una atmósfera radiante y fresca, perfecta para el dormitorio de un bebé. Es también común encontrar habitaciones de este tipo donde el color gris ocupa la mayor parte del espacio, principalmente en las paredes, mientras que el color rosa se encarga de dar algunos pequeños pero sutiles toques de color al ambiente.
También es aconsejable mezclar sutiles estampados de color rosa sobre una pared principal grisácea. Aquí es necesario tener en cuenta que cuando el color gris cubre la mayor parte de las paredes del dormitorio brinda un aspecto o aire de tranquilidad y estabilidad, mientras los estampados de color rosa dan mayor versatilidad y un aspecto más divertido a la habitación, ya que si se tuviera un solo fondo gris imperaría la monotonía, de allí que la combinación de ambos colores logre un resultado tan espectacular y apetecido por las parejas modernas.
Los colores rosa y gris tienen la particularidad de ser colores que no resultan invasivos, son más bien neutros, sobre todo en sus gamas más pastel, de esta manera resultan ser ventajosos para propiciar el descanso del bebé, pero además siguen siendo apropiados para dormitorios de niños más grandes, de modo que nos ahorramos una preocupación extra y ganamos tiempo mientras nuestro pequeño va creciendo. Cosa que sucederá más rápido de lo que creemos.