El uso de las piscinas empotrables
El dinero a invertir, el espacio que haya en el jardín y el uso que se le dará son puntos que ayudan a elegir el tipo de piscina a colocar en casa.
Cuando se pretende elegir una piscina para el hogar muchas personas no saben por cual tipo inclinarse, sin embargo con solo tomar en cuenta las dimensiones de su jardín y el presupuesto que invertirá podrá tener una idea de cuál es la más aceptada. Existen varios tipos de piscina, sea de obra, desmontables, inflables, empotrables, etc., su elección dependerá de los gustos y las necesidades de la persona.
La ubicación, la forma y el emplazamiento de la piscina son punto de gran importancia que se deben tomar en cuenta a la hora de elegir una piscina empotrable, ya que esta al ser una opción definitiva, o sea, que ya no se puede desinstalar una vez hecha en el jardín, su elección ha de ser la perfecta.
La forma en que se pueden adquirir estas piscinas son muy variadas, por ejemplo, estas pueden tener formas rectangulares, circulares, en L, ovaladas y en doble circulo. Cada una de estas formas se logra adaptar perfectamente a los procesos de prefabricación. De estas opciones la de mayor uso debido a su bajo coste y al ser la más clásica de todas es la rectangular, a esta en ocasiones se le añaden acabados para darle mucho más estilo y comodidad a las personas al momento de acceder a ella, por ejemplo se colocan en el lateral y los extremos escaleras semicirculares que son ideales para ingresar o salir de la piscina.
Las piscinas en L también son tomadas en cuenta pero en jardines mucho más amplios, ya que se trata de dos piscinas en una, por lo general la profundidad de estas son distintas en ambas piscinas, donde se divide una para niños y otra para adultos. También cabe destacar las piscinas ovaladas que al igual que las piscinas rectangulares tienen la misma longitud, pero esta vez poseen una menor cantidad de agua. Con esta forma se logra controlar mucho mejor el funcionamiento de los rebosaderos, de los skimmers y de las boquillas de impulsión.
Si la persona busca una piscina que logre integrarse a su jardín lo ideal es optar por las piscinas de forma redonda, las cuales utilizan la misma longitud pero con un menor volumen de agua, estas son ideales cuando en casa hay niños. Otra opción de piscinas empotradas son las que tienen forma libre, las cuales son alboradas dependiendo la forma y el tamaño que posea el lugar donde la persona quiere la piscina. Estas piscinas se adaptan perfectamente a cualquier espacio gracias a sus paneles modulares que son ensamblados sin ningún problema en el jardín. Los paneles que utiliza pueden ser convexos o cóncavos, y la base se elabora ya sea de hormigón, de aluminio, de fibra de vidrio o de acero galvanizado.
Al elegir una piscina ha de tenerse en cuenta que mientras mayor sea el volumen del agua de la piscina más costosa resultará, no solo su adquisición sino también su mantenimiento. Al momento de colocarla en el jardín no se deben colocar en suelos muy húmedos o rocosos, no debe haber árboles en su alrededor que puedan dar sombra, y debe haber sol suficiente.