La elección entre luces directas o luces difusas para lograr la excelencia lumínica

Los techos son los lugares clásicos e ideales para colocar luminarias, la luz que proviene desde arriba es la mejor por producir sombras hacia abajo y no alteran el volumen de los objetos, solamente los destacan.
Las luminarias ideales colocadas en los techos son las que se combinan con luces difusas de gargantas con tubos fluorescentes interiores- que actúan por rebote de rayos lumínicos difundiéndolos- con las luces de focos directos dirigidos a puntos específicos para destacar determinados muebles u objetos. Hay casos donde también se dirigen los focos hacia los cuadros artísticos colgados en las paredes para hacerlos destacar.



