CABKOMA Strand Rod, sistema innovador que emplea diversas varillas flexibles de fibras de carbono que refuerzan edificaciones ante terremotos.
Se trata de la obra presentada por el arquitecto Kengo Kuma y construida por la compañía Komatsu Seiren Fabric Laboratory en Japón, en la cual se utilizó una nueva fibra de carbono que ofrece un refuerzo antisímico que será catalogado como el más ligero a nivel mundial.
Este refuerzo antisísmico hecho de fibra de carbono y tela se conoce como CABKONA Strand Rod, y se presenta como una revolucionaria fibra termo-plástica, la cual es cubierta con fibras inorgánicas y sintéticas que a la vez son revestidas con resinas termo-plástica. En pocas palabras, su núcleo se basa en la combinación de fibra de carbono con otras fibras que luego se cubren con resina termoplástica.
Con su utilización aquellos que se encuentren en el interior de un inmueble podrán sentirse seguros cuando se produzca un terremoto, ya que por sus filamentos la estructura se protegerá, ya que el material ofrece una excelente y elevada resistencia a la atracción, donde supera en fuerza al acero y a la vez es 90 por ciento más ligero.
Este material es tan ligero que una persona puede transportar mano alrededor de 158 metros. Se presenta como un gran cuerpo estructural que cubre la edificación, sin embargo es muy delicado, ligero y no influye en la estética del lugar, más bien aporta un estilo mucho más innovador y elegante.
El arquitecto Kengo Kuma, ha sido el primero en implementar este elemento antisísmico en la elaboración de sus diseños estructurales, quien la implementó en los planos constructivos de la sede de Komatsu Seiren. Esta sede en adición posee materiales greenbiz y textiles, y se utilizó una torta de biomasa, arcilla y tierra, lo cual es parecida a la cerámica porosa y esponjada, que en conjunto le da a la estructura una mayor resistencia ante sismos.
Estas fibras serán comercializadas en rollos, las cuales serán muy fáciles de transportar debido a su ligero peso, por ejemplo un rollo de unos 160 metros tiene un peso de 12 kilos. La misma absorbe a la perfección las ondas de choque sin adicionar volumen.
Este refuerzo se podrá utilizar no solo en las futuras construcciones sino también en las ya construidas, principalmente en aquellas estructuras de patrimonio cultural y turístico. El refuerzo consiste en atornillar y asegurar con adhesivo cables o bandas flexibles y delgada de fibras de carbono a cualquier edificación como si fuese un arpa, cubriéndolo en su totalidad terminando en el subsuelo, lo cual lo hará resistir un terremoto.
La forma en que esta fibra protegerá las edificaciones de los terremotos es que al atar la edificación al suelo, cubriéndola por completo por las fibras delgadas, la misma en vez de colapsar se podrá mover al mismo nivel en que se mueve la tierra durante un terremoto.
Su resistencia se medirá según los años y los materiales usados en la construcción de la edificación, sin embargo en caso de demostrar algún efecto la edificación, el mismo será estético.
Para aumentar la resistencia ante terremotos, también las paredes del interior han de ser reforzadas como lo hizo el arquietcto con su diseño, en el cual aplicó hebras adicionales.