La arquitectura: Relación Artificial-Natural. Mas que ninguna forma de arte , la construcción y la arquitectura tienen una relación directa con la naturaleza. La naturaleza comprende no solo lo que el topos ( el lugar dado ) , sino también el clima y la luz, aspectos de la naturaleza a los que la forma arquitectónica debe responder.
La forma arquitectónica es también susceptible, de manera inherente, al paso del tiempo y al cambio de las estacione. Todo esto es virtualmente evidente y , sin embargo, tendemos a olvidar como la civilización universal ( por ejemplo la tecnología universal ) en forma de eliminar exactamente los aspectos que de otra manera reflejarían las características de un lugar en particular, el clima y la cultura.
Algo similar no puede decir de la supresión de la luz natural en relación a los cambios del día o la estación; como es claro el ejemplo de la moderna galería de arte totalmente cerrada con el clima artificial.
Por supuesto, es bien conocido que la luz ultravioleta tiene un efecto deteriorante en ciertas formas del arte, pero entre la filtración y reflexión de la luz natural y su exclusión total ciertamente debe de haber alguna posibilidad para modularla y controlarla.
En cuanto al impacto ecológico negativo e la maximización de los servicios mecánicos y no solo me refiero al excesivo consumo de energía y a la contaminación que resulta, sino también a la manera en que las estructuras herméticamente selladas y acondicionadas son virtualmente incapaces de responder a las condiciones climáticas somos testigos, otra vez de la manera en la que la forma construida ha sido privada de su capacidad de mediadora, tal como invariablemente ha sido cuando provee sombra y ventilación naturales y cuando se adapta a los rigores de las estaciones
¿ Quien no ha experimentado la incomodidad de no poder abrir una ventana durante un clima templado en un edificio con aire acondicionado ? A esta falta predeterminada de flexibilidad se puede añadir indiferencia tecnológica del criterio del aire acondicionado integral en contra de los beneficios que se obtienen cuando se usan ciertas formas de distribución en el lugar de otras.
Me refiero al efecto de ventilador que se induce al colocar patios cerrados, que permiten un entorno fresco mas fresco en el verano y mas calido en el invierno. Esto no debe entenderse como una polémica en contra del aire acondicionado, aunque ciertamente indica edificios con formas continuas y poco elevadas, en lugar de proliferación de los edificios libres de gran altura.
Los desequilibrios producidos por el uso imprudente de la alta tecnología, de lo artificial, sin importar la ayuda que puedan dar las condiciones climáticas.