Existen diferentes tipos de pérgolas, todas ellas comparten una característica en particular: permitirnos disfrutar del contacto con la naturaleza protegiéndonos del clima; pero también existe otra alternativa y son las pérgolas cerradas que nos aíslan completamente del exterior.
Se supone que si queremos descansar al aire libre es porque queremos mantener una relación con la naturaleza, y por eso las pérgolas abiertas son nuestra mejor opción.
Pero también existen otros casos donde se necesita aislarse totalmente del exterior y solo tener un contacto visual con el por medio de paneles acristalados, justamente los que nos ofrecen las pérgolas cerradas.
Estas son una alternativa diferente a las pérgolas que conocemos comúnmente y se utilizan más en casos de querer crear ambientes extras en la casa. Quizás por falta de lugar o por el hecho de ampliar aun más nuestra comodidad, necesitamos agregar un ambiente no privado a la casa y podemos hacerlo por medio de este tipo de pérgolas.
Las pérgolas cerradas son aquellas que se encuentran completamente cubiertas en sus 4 lados y el techo. Por supuesto cuentan con una puerta, por lo general corrediza, para poder acceder a su interior o salir; como así también con ventanas que permiten la ventilación del lugar. El techo, como ya dijimos, es completo y fijo por lo que es un excelente refugio para la lluvia.
Estas pérgolas se presentan en innumerables diseños y estilos. Puedes encontrar pérgolas con paredes de cristal, u otras que combinan el cristal con la madera, entre otras tantas opciones. Si buscas un diseño más económico entonces puedes ir por las que combinan el metal, generalmente aluminio, con cristal ya que las de madera siempre tienen precios más elevados.
También algunas poseen techo acristalado, mientras que otros prefieren los techos de tejas o metal para evitar que la luz se cuele con fuerza al interior y quizás por temor de que el cristal sea un material delicado y vulnerable. Todo es cuestión de gustos y afortunadamente existen diseños para complacer a todos. Estas pérgolas cerradas también se utilizan muchísimo en la decoración de terrazas.
Aquí que estamos más expuestos a los rayos del sol como a las tormentas intensas, necesitamos de un espacio cerrado donde estemos completamente aislados del exterior, y las pérgolas son una muy buena opción para evitar los trabajos de obras y otras modificaciones permanentes. Igualmente en el jardín también quizás deseemos tener un espacio cerrado donde podamos montar una sala de estar con muebles no aptos para estar a la intemperie – son mas económicos y se presentan en mejores diseños – por lo que las pérgolas cerradas son una excelente solución para no tener que preocuparnos por los daños que el clima le pueda hacer a estas piezas decorativas.
Ademas, al tener una pérgola cerrada podremos disfrutar de estos espacios en todo momento del año, sin importar la estación del año o el horario del día, siempre encontraremos un ambiente confortable que nos acoja para descansar y relajarnos teniendo una preciosa vista hacia el exterior.
