Entre sus arquitectos podemos citar a Theo van Doesburg, Jacobus-Johannes-Pieter Oud, Jan Wils y Gerrit Rietveld.
THEO VAN DOESBURG (Utrecht, 1883-Davos, Suiza, 1931) es el verdadero animador del grupo, del que hace una continua defensa hasta que se produce la ruptura con Mondrian en 1928, aunque su disolución había comenzado ya en 1923.
En 1920 inicia una gira europea para difundir sus ideas y establece contactos con Gropius, Taut y otros. En 1921 desarrolla sus teorías del color para la arquitectura en sus proyectos para viviendas de clase media y para la Escuela de Agricultura de Drachten.
Tras su estancia en la Bauhaus, en el año 1922 se traslada a París, donde en 1925 elabora la teoría del elementalismo en la que introduce la línea diagonal. Entre 1926 y 1928 colabora con Sofía Taeuber-Arp y Hans Arp en la reconstrucción interior del café de lAubette de Estrasburgo, llevando a la práctica su teoría elementalista en grandes pinturas murales. Obra esta en la que, en opinión de Mondrian, se traicionan los principios neoplasticistas.
JACOBUS-JOHANNES-PIETER OUD (Purmerend, 1890-La Haya, 1963) es uno de los cofundadores del grupo neoplasticista, que abandona en 1921. En su obra tienen un papel importante su independencia como arquitecto y la concepción social de su profesión.
Sus primeros trabajos se ajustan a la arquitectura tradicional holandesa, de la cual son buen ejemplo las casas construidas con ladrillo en su ciudad natal, que además reflejan también la influencia de Berlage y de Wright (Berlage es la gran figura holandesa de comienzos de siglo, que reacciona contra el eclecticismo y propugna la construcción en ladrillo visto). Su obra más importante es La Bolsa de Ámsterdam, de 1900. En 1913 se establece como arquitecto independiente en Leiden. Oud es nombrado en 1918 arquitecto de Rótterdam, cargo que ocupa hasta 1933. Este hecho le permite diseñar barrios constituidos básicamente por viviendas sociales, como el barrio Spangen (1918) y el barrio Tusschendijken (1919).
De este mismo año es la realización de la factoría de Purmerend, que en sus partes laterales es deudora de Berlage y de Wright, mientras que el bloque central se ajusta a las normas stijlianas. El rigor del movimiento es seguido con fidelidad en el barrio Tusschendijken, en el que corta los chaflanes en ángulos para poder introducir planos verticales.
El resultado es un conjunto monótono que escandaliza a Van Doesburg, ya que la repetición de un mismo modelo es contraria a los principios dinámicos de De Stijl. La obra más importante de Oud es el café De Unie (1925) de Rótterdam, destruido en 1940 y reconstruido en 1986. Su fachada, semejante a un cuadro de Mondrian, está pensada como un cartel publicitario, con letras del rótulo en nueva tipografía y colores rojo, azul, amarillo, blanco y gris. Todo ello atrae la atención del espectador, que se ve casi obligado a examinar la geometrización total de la fachada. En 1923 realiza una casa semipermanente en Oud-Mathenesse en la que se expresa por medio de los volúmenes de los distintos cuerpos que constituyen el conjunto.
Los bloques se diferencian entre sí por los diversos colores en que están pintados. A partir de 1924, Oud se afirma como arquitecto, dejando a un lado la pintura y adhiriéndose por completo al estilo internacional.
En ese año proyecta la ciudad obrera de Hoek van Holland, un primer acercamiento hacia ese estilo, en este barrio las casas se integran en alargados bloques de línea aerodinámica, chaflanes redondeados y balcones. Entre 1925 y 1930 diseña el barrio Kiefhoek en Rótterdam, una colonia obrera en la que se siguen los principios de la estandarización. Sigue también estos principios con gran fidelidad en el proyecto presentado para la Weissenhof Siedlung de Stuttgart en 1927. En la década de los treinta junto a realizaciones arquitectónicas, lleva acabo diseños de muebles e interiores. Finalizada la Segunda Guerra Mundial, participa en la reconstrucción de Rótterdam.
GERRIT THOMAS RIETVELD (Utrecht, 1888-1964) puede ser considerado como uno de los creadores del diseño moderno en mobiliario y uno de los renovadores del lenguaje arquitectónico. Da sus primeros pasos en el mundo del arte en el campo del diseño industrial, primero en la carpintería de su padre (1899-1906) y después como diseñador en el estudio de Carel Begeer, hasta 1911.
Son unos años en los que asiste a cursos de diseño para perfeccionar su aprendizaje sobre los materiales y las formas. A partir de 1911 se especializa en la producción de muebles y, paralelamente, sigue unos cursos en el estudio del arquitecto Klaarhamer, donde conoce al pintor Van der Leck, quien le presenta a los componentes del grupo De Stijl. Rietveld ingresa en el grupo en 1919, año en que comienza su actividad como arquitecto.
En su producción podemos establecer tres períodos principales: el primero coincide con su permanencia en el grupo (años 1918 a 1931); el segundo, que abarca hasta 1950, se inicia con su proyecto de la casa Laren (1932), y el tercero (1950-1964), cuyo principio se marca con la casa Velp.
La primera fase es la más rica e importante, tanto en el campo arquitectónico como en el del diseño industrial. En 1918 realiza un prototipo de silla en madera pintada, la silla roja y azul (tiene también colores negro y amarillo). Es el primer ejemplo de diseño razonado basándose en la estructura modular y geométrica de sus partes, y con un alto grado de simplificación y racionalización para hacer viable una sencilla y rápida fabricación. Este sistema le facilitará en los años siguientes el diseño de sillas para oficinas, para niños, mesas auxiliares, aparadores, lámparas, etc.
En 1920 lleva a cabo una importante obra de interiorismo, el diseño de la sala de consultas de la clínica del Dr. Hartog de Maarssen, cerca de Utrecht. Para esta sala diseña muebles y una lámpara a modo de una bella escultura formada por tubos incandescentes de Philips, que, con una ligera variante, coloca años más tarde en la casa Rietveld-Schröder (Gropius realiza un modelo basado en ella para su despacho en la Bauhaus de Weimar). En 1921 entra en contacto con la señora Truus Schröder-Schrader, que en 1923 le encarga proyectar y construir una casa en las afueras de Utrecht.
Para este edificio se plantea el trabajo en equipo: él es el responsable del diseño general y de los colores, y Schröder-Schrader de la planta abierta del piso alto.
El aspecto más notable de la casa Rietveld-Schröder es la independencia visual de sus partes, conseguida por la separación física de los planos; la utilización del color, que acentúa y determina la identidad de cada parte; el uso de los planos libres y la modulación de los planos horizontales y verticales. A ello se han de añadir las soluciones interiores, con espacios libres que pueden modificarse por medio de paneles movibles, y el mobiliario, perfectamente integrado, tratado como un elemento arquitectónico más. Consigue que el edificio sea un todo flexible, tanto en el exterior como en el interior.
Esta casa es la demostración de la madurez metodológica arquitectónica en consonancia con la poética neoplasticista de su autor. Sigue colaborando con la señora Schröder en los años treinta. En este período realiza entre otras obras, el garaje De Vries (1928), la casa Row (1934) y el cine Vreeburg (1936) en Utrecht. En el segundo período se replantea el tema de los nacionalismos, vigente en la época, que debilita sus bases metodológicas y le lleva a la realización de obras de carácter más tradicional, como la casa de verano de Breukelerveen (1941).
Reaparecen en el tercer período los principios neoplasticistas, como puede observarse en la casa Stoop (1951), de Velp, y en los pabellones realizados para exposiciones internacionales. Aunque Rietveld es uno de los pocos artistas que permanece fiel a Van Doesburg, tiene también sus diferencias con él; participa, aún en contra de la opinión de éste, en una exposición de la Bauhaus de 1923 y es uno de los fundadores de los CIAM (Congresos Internacionales de Arquitectura Moderna) en 1928.