¿Qué es una hipoteca por pagar?
Las hipotecas por pagar son préstamos contraídos por las empresas pero debidamente garantizadas con bienes e inmuebles, y sobre las cuales no puede pesar enajeción o gravamen sin la debida cancelación.
Los pasivos a largo plazo está representado por los adeudos cuyo vencimiento sea posterior a un año (1), o al ciclo normal de las operaciones de éste es mayor.
Se originan de la necesidad de financiamiento de la empresa ya sea, para la adquisición de activos fijos, cancelación de bonos, redención de acciones preferentes, etc.
Los pasivos a largo plazo dentro de las empresas mas comunes son: los Préstamos hipotecarios y los Bonos u Obligaciones por pagar.
INDICE DE TEMAS
Las Hipotecas por pagar
Características de las hipotecas por pagar.
- Si el deudor no cumple con el pago, se ejecutará la hipoteca, rematando el bien y el acreedor o prestamista cobrará el monto del capital de la hipoteca, los intereses que estos hayan causados, los gastos judiciales y cualquier otro gasto por el cual haya incurrido el incumplimiento de la misma.
- El acreedor no llega a ser necesariamente el propietario del bien hipotecado.
- La hipoteca debe ser registrada debidamente en el Registro Público para que tenga efectos legales y poder actuar en caso de no cumplirse con las cláusulas establecidas al momento del préstamo
Las tablas de Amortización.
Las tablas de Amortización sirven para reflejar como se está realizando el pago de una deuda contraída mayormente representados por inversiones cuantiosas que la empresa desea realizar y en donde se mueve a lo que se le llaman «documentos por pagar a largo plazo», ya que, enormes cantidades de dinero no pueden ser pagados al momento, porque se daría en caso de que la empresa se quedara sin liquidez (a menos que sea un tipo de empresa donde le efectivo sea su forma de pago de manera continua y no mediante cheques).
Estas inversiones generan intereses y gastos, por lo tanto, se necesita llevar un control de lo que se va amortizando (pagando o gastando la deuda).
¿Cómo funciona una hipoteca?
Elegir una hipoteca no es una tarea fácil, por más que en otros tiempos lo hubiese parecido. Encontrar una buena hipoteca depende de muchos factores, y si no nos fijamos con la suficiente atención podemos acabar firmando unas condiciones muy perjudiciales, como una cláusula suelo o un aval abusivo. Estos son los puntos en los que nos debemos fijar al pedir una hipoteca:
Tipo de interés.
Se trata de un índice hipotecario sumado a un diferencial que sirve para definir el interés que pagaremos y, por tanto, la cuota de la hipoteca. Respecto a este punto debemos elegir el diferencial más bajo combinado con el índice que más nos beneficia (suele ser el Euribor). Sin embargo, no es tan sencillo. Para elegir con criterio deberemos fijarnos también en si existe un interés fijo inicial y de qué cuantía, así como verificar que no existe un interés suelo (interés mínimo que pagaremos aunque bajen los tipos) o que al menos éste es lo más bajo posible
Cuota que pagaremos.
Ojo con los bancos que te hablan de la cuota y no del interés. Es un elemento muy volátil, especialmente en las hipotecas a tipo variable (la gran mayoría), por lo que aunque nos prometan una cuota de 300€ al mes ésta puede doblarse o triplicarse en muchos supuestos (si había un interés inicial bajo, si había carencia de capital o si en un primer momento el Euribor estaba muy bajo)
Porcentaje de financiación.
Normalmente los bancos no conceden una financiación superior al 80% del valor de la vivienda. Si necesitamos un porcentaje mucho menor, el banco tiene un riesgo más bajo, así que podremos conseguir mejores condiciones. Y lo contrario sucede si necesitamos más de un 80%: en el supuesto de que nos la concedan, las condiciones pueden ser muy duras
Comisiones.
Es un punto muy negociable. Las más comunes son la comisión de apertura y estudio (entre el 0% y el 1% normalmente), la comisión de amortización parcial o total, la de subrogación y la de novación (éstas nunca superiores al 0,50% los primeros 5 años y 0,25% después)
Productos vinculados.
Muchas hipotecas requieren contratar productos vinculados como seguros o planes de pensiones, además de domiciliar nómina y recibos. Conviene conocer el coste de estos productos y valorar si merece la pena o no contratarlos
Flexibilidad.
En ocasiones los bancos ofrecen hipotecas flexibles, es decir, con la posibilidad de pagar más o menos en ciertos momentos según nuestras necesidades. Hablamos de periodos de carencia, aplazamientos de cuotas e incluso de amortización libre
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Rubros que pertenecen a los pasivos a largo plazo.
En el presente trabajo se tomarán en consideración, rubros que pertenecen a los pasivos a largo plazo, como:
- Hipotecas por pagar
- Créditos diferidos
- Los efectos por pagar a largo plazo
- Y el fondo de amortizaciones.
Son todos aquellos adeudos que están representados por documentos, hipotecas, o títulos; y cuyo vencimiento en el largo plazo es mayor a un (1) año para aquellas empresas que por sus características especiales así lo tengan.